La tomografía axial computarizada (TAC) es una prueba radiológica que utiliza rayos X con un sistema informático que procesa las imágenes y que permite obtener imágenes del interior del cuerpo en forma de cortes transversales o en forma de imágenes tridimensionales. En ocasiones se inyecta o se ingiere un contraste para destacar mejor los órganos o tejidos. Se utiliza en el momento del diagnóstico, para planificar un tratamiento o para valorar su eficacia.